Días contados

YO SOY AQUÉL


Si durante años los programas de espectáculos se refugiaron en escándalos provocados por algunos artistas, deportistas y demás celebridades con la colaboración de éstos en la mayoría de las veces, hoy esa fórmula, al igual que la de los llamados reality shows, tienen sus días contados. Los programas como Ventaneando, que llegó a tener altísimos niveles de audiencia; La Oreja, que compitió por algún tiempo con el de Paty Chapoy y otros tantos, hoy parece que ya no tienen el empuje ni cuentan con el favor del público. Lo que fueron interesantes comentarios y divertidos sainetes se convirtieron en grotescas corretizas a artistas, lamentables seguimientos de penosos episodios.

Se olvidaron de lo esencial, que es el espectáculo mismo y no la vida de los que lo generan, y poco se involucraron en advertir una gran gira de teatro, la ópera, ballet, jazz, rock, flamenco, etcétera. Parecía que lo más importante era un divorcio, un rompimiento o una pelea, aunque fuera inventada, no importa. Era más importante preguntarle a Silvia Pinal acerca de una supuesta borrachera de su nieta, que su opinión acerca de Luis Buñuel… En fin, un nivel muy bajo y criterios demasiado fáciles para captar audiencia. Funcionó algún tiempo, pero en una época en donde lo menos que ves es una fotografía de un decapitado todos los días en los periódicos, es entonces cuando el sensacionalismo barato es poco menos que infantil y ridículo.

Televisa ya lo entendió y saca una nueva oferta a partir de enero, la cual llevará por nombre Escénica y no será otra cosa que un intento por informar lo que pasa en torno a todos los espectáculos, dándole mas importancia a lo que en realidad lo tiene y menos a lo que no. Es un esfuerzo más periodístico que editorial y una nueva oportunidad por tratar de recuperar el respeto a los que hacen del entretenimiento una forma de vida.

A ver si es cierto.



FUENTE: Record Diario Deportivo
Esteban Arce, Yo soy Aquél...
Lunes 24 de Noviembre de 2008



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