Un Lunario ideal

Yo Soy Aquél

La semana pasada tuve la fortuna de asistir al Lunario del Auditorio para ver el concierto de Jorge Villamizar, sí, aquél líder de la extinta banda Bacilos que llegó a ganar el Grammy que otorga la Academia estadounidense, no el latino, la misma banda que se convirtió en el icono de los latinos jóvenes que viven en Miami. Pues este talentoso cantautor se lanzó como solista y en verdad es muy, pero muy bueno, pero lo que más disfruté fue del lugar. Sin duda hoy disfruto mucho más un concierto ahí, cualquiera que éste sea, que los grandes conciertos masivos en donde desde que sales es toda una aventura, ya que el tráfico, el estacionamiento, los empujones, localizar tu lugar, tener que escuchar una banda que abre y suena peor que un paliacate de a peso, los grupos de borrachitos que gritan porque así tiene que ser, según el manual del beodo en los conciertos, y también soportar los gritos histéricos de jovencitas que, lo mismo se excitan al ver al encargado de la iluminación que al ver al propio artista en turno, o soportar al de atrás cantando pésimamente todas las rolas que se sabe del artista y, lo que es peor, cuando es en inglés lo que se escucha son ruidos parecidos a las frases en inglés de la letra de la canción. En fin, todo un via crucis.
En cambio, el Lunario del Auditorio Nacional tiene la virtud de alojar recitales en donde puedes estar cómodamente sentado, con servicio de mesero, sin estridencias, sin empujones, sin ataques de histeria, sin todo lo que conlleva un concierto masivo a sólo unos metros del Lunario.
Si bien el Auditorio Nacional ha sido elegido por los concertistas que lo han utilizado como uno de los mejores lugares del mundo para ofrecer un espectáculo, también es cierto que todavía mejor es poder asistir al Lunario, que dentro del mismo inmueble se convierte en un lugar para, en verdad, disfrutar de un artista. Su capacidad es la ideal, quizá de unas 600 personas, la acústica es excelente, los accesos, los baños y un largo etcétera.
Yo creo que es mi edad la que va cambiando mis preferencias en cuanto a evaluar un recinto de espectáculos, pero me ha tocado, por mi trabajo en WFM, Vox, Telehit y demás, cubrir conciertos en muchas partes del mundo, por lo que creo tener el criterio para poder decir si un lugar tiene condiciones o no, y así como no me gusta ir al Palacio de los Deportes, ni a palenques, ni a cabarets, ni a grandes estadios, sí les puedo decir que el Lunario y el Auditorio Nacional son un lujo que tenemos que valorar.


FUENTE: Record Diario Deportivo
Esteban Arce, Yo soy Aquél...
Lunes 20 de Octubre de 2008